MENSAJE DE LOS PARTICIPANTES
EN LA ASAMBLEA CONJUNTA DE
OBISPOS Y PRESBÍTEROS
CELEBRADA DEL 09 AL 10 DE
JULIO DE 2014
EN EL CONTEXTO DE LA CII
ASAMBLEA ORDINARIA DE LA CEV
1. A los hermanos presbíteros de la
Iglesia que ejercen su ministerio pastoral en Venezuela, gracias y paz en
Jesucristo Buen Pastor.
2. Los Arzobispos y Obispos de la
CEV, junto con los hermanos Presbíteros, delegados de los presbiterios de las Iglesias
particulares que caminan en nuestro País, hemos celebrado durante los días 09 y
10 de julio, la asamblea conjunta de Obispos y Presbíteros, que vinimos
preparando durante los primeros meses de este año, a través del itinerario de
encuentros diocesanos y provinciales, en los cuales tuvimos la oportunidad de
participar y aportar la gran mayoría de todos los Presbíteros y Obispos de
Venezuela. Dicha asamblea ha sido un verdadero encuentro fraterno y un
ejercicio de comunión que, llenos de gozo en el Señor queremos compartir con
todos ustedes.
3. Como bien sabemos, el objetivo del
encuentro fue “Fomentar
una mayor vivencia de la espiritualidad de comunión, entre los obispos y
presbíteros, como signo de la identidad teológica ministerial, que nos ayude a
realizar fraternalmente la misión y ministerio recibido”. (cf. DA 192). Su metodología fue la de “explorar, Iluminar, operativizar, evaluar y celebrar; a través del compartir
experiencias, el escuchar a los otros, el apoyo mutuo, y la revisión de la
vivencia del ministerio y vocación como pastores del pueblo de Dios”. Esto se realizó el primer día a través de un trabajo en grupo a partir de las
conclusiones de los previos encuentros diocesanos y provinciales sobre la
vivencia de la identidad y misión sacerdotal en el día a día.
4. Para la iluminación, el Pbro. Miguel Ospino, del clero de la
Arquidiócesis de Maracaibo y Rector del Seminario mayor Santo Tomas de Aquino,
dirigió una Lectio divina sobre la Identidad Sacerdotal y Espiritualidad de
Comunión.
5. Al segundo día,
nuevamente organizados en grupo, y teniendo como referencia los cuatro desafíos
del documento “Obispos, Presbíteros y
Diáconos al servicio de una Iglesia en comunión” del CPV se propusieron Líneas conjuntas de acción para vivir la
Identidad y la misión sacerdotal.
6. Igualmente, tuvimos la
oportunidad de concelebrar en las dos celebraciones eucarísticas diarias; la
primera, presidida por el Excmo. Mons. Diego Padrón Sánchez, Arzobispo de
Cumaná y Presidente de la CEV, la segunda, presidida por el Excmo. Mons. Enrique Pérez Lavado, Obispo
de Maturín y Presidente de la Comisión Episcopal de Clero, Vocaciones y
Seminarios.
7. El ambiente de la
asamblea fue de una gran cercanía entre obispos y presbíteros, de apertura y amplia participación de todos, con
sincera fraternidad y responsabilidad conjunta. Departimos entre todos durante
las comidas, en especial en el encuentro festivo de la noche del miércoles 09.
8. Sin perder nunca de vista
la realidad del Pueblo de Dios en Venezuela y los desafíos que ésta nos plantea
a los pastores, hemos descubierto en ella el llamado del Señor que nos ama, nos
elige y nos envía. Pero, también, hemos percibido las necesidades fundamentales
de nosotros obispos y sacerdotes, para responder más y mejor a nuestra misión y
para nuestra santificación en el ejercicio de la caridad pastoral.
9. Si bien, pudimos
agradecer al Señor por la vida y ministerio de tantos hermanos nuestros en el
sacerdocio, que viven con alegría su vocación, en la entrega generosa de cada
día, también percibimos la situación de otros hermanos cansados, desanimados,
que se sienten solos. De otros, que por su juventud, requieren orientación y
acompañamiento. Lo que nos puso de relieve la urgente necesidad de promover, a
todos los niveles e instancias eclesiales, una pastoral sacerdotal debidamente
planificada e integral; que tome en cuenta, desde la asistencia espiritual y el
apoyo pastoral, pasando por el estímulo de experiencias de vida fraterna, hasta
la seguridad, salud y asistencia social, principalmente de los sacerdotes y
obispos enfermos y ancianos. Se planteó la necesidad de una mejor atención a
aquellos hermanos en el ministerio que se encuentran en situaciones
problemáticas, señalándose que en nuestro País no existe este tipo de ayuda
organizada y que son necesarios lugares y personal interdisciplinar idóneo que
puedan proporcionar y prestar este servicio.
10. Tuvo especial realce, entre los elementos que debe
abarcar la pastoral sacerdotal, la formación permanente del clero. Al respecto,
fue enriquecedor compartir las iniciativas que en este orden se vienen
realizando en algunas diócesis, pero percibimos la necesidad de un programa a
nivel nacional que trace itinerarios para la formación permanente de los
ministros ordenados de Venezuela.
11. Se insistió mucho, en estructurar el acompañamiento a
los recién ordenados.
12. Así como se vivió en la asamblea conjunta una cercanía
fraterna entre obispos y sacerdotes, se hizo insistencia en que en el diario
caminar de nuestras iglesias particulares, cada obispo procure ser cada vez más
padre, hermano y amigo de sus sacerdotes. Así como los sacerdotes promover
todas las iniciativas fraternas posibles entre sí y para con sus obispos.
13. Se hizo hincapié en la revisión de la formación que se
está impartiendo en los seminarios; en especial, en lo referente a la
espiritualidad del encuentro personal de los candidatos con Jesucristo, en el
cultivo de las virtudes para la vida fraterna y solidaria, en la eclesiología
de comunión y para un nuevo paradigma sacerdotal misionero. Se señaló cómo aún
están saliendo de nuestros seminarios, personas sin experiencia de Dios, con
mentalidad individualista y de auto provecho, con una concepción de Iglesia
institucional y formalista, con un modelo de sacerdote instalado y funcionario
religioso. Se insistió en la preparación y selección de los integrantes de los
equipos formadores; sobre todo, del director espiritual.
14. Fue unánime entre nosotros el propósito de hacer
llegar a todos los presbiterios las propuestas y conclusiones de esta asamblea
conjunta. Sugerimos que, en un itinerario similar al preparatorio, las bajemos
y estudiemos con nuestros hermanos sacerdotes en nuestras localidades.
15. Igualmente, se propuso que esta asamblea conjunta
fuera un punto de partida para una sucesiva serie de encuentros a niveles
zonales o arciprestales, diocesanos,
provinciales y nacionales, para
seguir profundizando en la identidad del sacerdocio ministerial, la espiritualidad
de la caridad pastoral, los nuevos paradigmas de ministros ordenados para la comunión
y la misión en Venezuela.
16.Reconfortados por tan enriquecedor encuentro,
agradecidos a Nuestro Señor Jesucristo, Buen Pastor y encomendándonos a Nuestra
Señora de Coromoto, regresamos a nuestras diócesis y vicariatos comprometidos a
continuar nuestro caminar juntos hacia las metas trazadas en esta Asamblea
Conjunta de Obispos y presbíteros.
Caracas, 25 de Julio de 2014, Fiesta de Santiago
Apóstol.
A nombre de
todos los Obispos y Sacerdotes participantes
+Enrique Pérez Lavado
Obispo de Maturín
Presidente de la Comisión Episcopal de
Clero, Vocaciones, Seminarios y Diaconado Permanente
